Todas las actividades que realizamos a diario dependen de nuestro descanso. Necesitamos dormir para recuperar fuerzas y poner a punto nuestro organismo. Cada día los seres humanos pasamos en la cama un tercio de nuestra vida, sin embargo el sueño no depende solo de la cantidad de horas que durmamos, sino también de la calidad del descanso.

Por eso, para cuidar de nuestra salud, y de la de nuestra familia, es importante que cuando vayamos a comprar un colchón, pensemos en ello como una inversión. Como la garantía para mejorar nuestra calidad de vida y, muy importante, para conseguir el mayor bienestar de nuestra espalda.

Un dato muy interesante, nos lo da un estudio de Asociación Europea de Fabricantes de Camas. Según esta investigación, somos los europeos que dormimos en colchones más viejos. Cambiamos nuestros equipos de descanso, cada 12 años, cuando ya el deterioro  es visible. Mientras los alemanes, italianos, franceses… lo hacen cada 9 años.

El descanso es bienestar físico y emocional, para dormir bien necesitamos un lugar silencioso y tranquilo y un buen colchón. ¿Pero cuáles son los mejores colchones? Cada persona es diferente, tiene sus propias características por lo que necesitará una pieza que se adapte a su peso, edad o estatura. En cualquier caso, antes de comprar un equipo de descanso, conviene visitar a un especialista que nos aconseje a la hora de hacer una elección tan importante.

Todos los elementos del descanso -almohada, colchón, base- son piezas fundamentales.  Así que recomendamos tomarnos el tiempo necesario antes de decidir una compra, e incluso acudir a la tienda para probar su firmeza y confort. En cualquier caso, pensamos que se trata de una ocasión inmejorable, de una oportunidad para invertir en nuestra salud y la de los nuestros.